Después de mi segundo viajecillo por tierras angloparlantes en apenas mes y medio, y de vivir un momento tan memorable como es el solsticio de verano en un lugar tan mágico como Stonehenge, tenía pensado narrar brevemente mi experiencia en tal acontecimiento, pero finalmente he decidido ir por partes y primero desahogarme comentando algunas reflexiones que no han parado de rondar en mi cabeza durante dichos viajes:
1. Los ingleses son granjeros ricos. A mi parecer no dejan de ser un pueblo de paletos, cuyos museos están llenos de obras y monumentos "robados" fruto de sus grandes épocas colonizadoras (ya se sabe que los granjeros sólo persiguen tierras y esclavos para cultivarlas), donde se caracterizaban por la expoliación de todo lo que tuviese algo de valor. Tendrán algunas de las mejores universidades del mundo, pero son cada vez más caras y elitistas, y ni mucho menos son representativas para estudios alejados del derecho o la economía, como pueden ser las ingenierías u otras ramas más tecnológicas. Al menos salen bien educados...
2. A los ingleses les encanta, conservar lo único que es realmente suyo - como casi todo lo demás lo han "robado"... - es decir, su monarquía, sus casas "inglesas", el volante a la izquierda, circular por la izquierda, su moneda (maldita libra...), y su sistema métrico no decimal (sus millas). Esto les convierte en un país, que aunque se considera a la vanguardia de Europa, continúan al revés del resto del mundo... ¿Qué ganan con ello? Os lo digo yo... que los demás pensemos que les gusta "ser especiales". Este hecho me parece increíble en pleno siglo XXI, dónde el progreso se caracteriza por la globalización, la convergencia y la definición de estándares.
3. Irlanda e Inglaterra están "plagados" de inmigrantes, y de españoles en particular. Al parecer eso nos les gusta ni a los ingleses ni a los irlandeses, que se creen europeos "de primera" y por lo tanto, ni se dignan en balbucear ningún otro idioma que no sea el francés, o el alemán, ya se sabe... los otros europeos "de primera" . El español, aunque prácticamente es el segundo idioma más hablado del mundo, no les debe de resultar muy atractivo. Para mí, tanto ingleses como irlandeses son bastante xenófobos, que conste que no me gusta generalizar de esta manera... pero es que es MI experiencia y me siento con el deber de reflejarla. ¿Se sentirá así un inmigrante aquí? Un turista seguro que no.
4. Los Irlandeses son como un "odio a los ingleses, pero hago todo lo que puedo por parecerme a ellos", de hecho se supone que les costó muchísima "sangre irlandesa" independizarse pero realmente la única diferencia que se aprecia entre un país y otro es el Euro(€) y que son "fanáticos religiosos" en vez de "fanáticos monárquicos". En este caso, yo los definiría como "ingleses pueblerinos". Su falta de educación es notable, no puedo más que recordar como eructaban y se "tiraban cuescos" por doquier. Sin comentarios.
Como se puede extraer de estas reflexiones, no tengo mucho aprecio a los anglosajones, de hecho, en mi opinión si no formasen parte de Europa y no tuviesen un idioma tan simple (por qué sera...) no serían más que un "quiero y no puedo de los americanos". Espero no tener que volver a esas tierras del continuo "agua-chirri " en mucho tiempo, porque, la verdad, es que he acabado bastante hastiado.